LA INMACULADA

María Inmaculada

 Estamos en vigilias de la gran fiesta de la Inmaculada Concepción. El Papa Pío IX proclamó como dogma de fe la Inmaculada Concepción de la Virgen María el 8 de diciembre de 1854, y 4 años más tarde, en 1858, la Señora que se aparecía a Bernardita en la Gruta de Massabielle, en Lourdes, al ser preguntada por cuál era su nombre, respondió: "Soy la Inmaculada Concepción". Celebremos con gozo esta gran fiesta. María fue preservada por Dios del pecado original en el momento de ser concebida. Nació Inmaculada. Esta fiesta se celebra el 8 de diciembre, exactamente 9 meses antes de su Natividad, que conmemoramos el 8 de septiembre.  

Madre Domitila, que tanto amaba a la Virgen, nos dirá en el Directorio:

"Al ir al Santo Rosario, hacer cuenta de que el mismo ángel Gabriel las exhorta a repetir a la Virgen la salutación que le hizo en su embajada. Contemplen la Capilla como la santa Casa de Nazaret, donde María estaba en oración. Deben ponerse en presencia de la Virgen y pedirle su bendición".   (Directorio XII. El Santo Rosario).

En Betania todos los días rezamos el Santo Rosario acompañando a nuestra Madre del Cielo. Ella fue saludada "llena de gracia" por el Arcángel Gabriel. Es toda llena de la gracia de Dios, toda Pura, toda Bella, toda llena de Amor.

Santo Rosario