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SÁBADO SANTO

La Virgen María en Sábado Santo

 Hoy es Sábado Santo. En este día recordamos la Soledad de la Virgen María. Su Hijo, Jesús, está en el Sepulcro, la mayoría de sus discípulos han huido, están escondidos, llenos de miedo, y Ella es la Única que sostiene la Fe de la Iglesia. Acompañemos a nuestra Madre en su dolor, en su oración, en su espera...

María espera la Resurrección. Ha acompañado a su Hijo en todos los momentos de dolor, ha sufrido con Él, su Fe no ha vacilado.

Todos los sábados son días especialmente dedicados a nuestra Madre del Cielo. No puede ser de otro modo. El primer sábado santo de la historia era Ella sola la que sostenía la fe vacilante de los discípulos de su Hijo. Pidámosle también nosotros que nos aumente la Fe. Digámosle con confianza, con seguridad, cómo nos decía el Padre Jordi Carrera i Savall, que ya está en el Cielo: "Madre, dame tu fe", y añadía: "Ella en el Cielo no necesita la fe. Ve a Jesús cara a cara. Nosotros la necesitamos. Pidámosle a Ella que nos la dé". Decía que él, Mn. Jordi, lo hacía todos los días. Todos los que le conocimos, sabemos qué grande era su fe y amor a Dios y a la Virgen. También nosotros podemos pedir con humildad los grandes tesoros de la Fe, del Amor, de la Confianza, y Dios nos los dará.

Mn. Jordi Carrera i Savall


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